"Shijouin-san".
Mi corazón se agitó cuando la joya de mi pasado apareció ante mis ojos.
Su pelo era largo y hermoso.
Sus ojos eran grandes y claros como una joya preciosa
Era la encarnación de la palabra "Yamato Nadeshiko" (Expresión japonesa que hace referencia a la «personificación de la mujer japonesa ideal», o al «epítome de la pureza y belleza femenina».
Su sonrisa despreocupada expresaba la belleza de su corazón.
La chica que he soñado desde que era estudiante, Shijouin-san, estaba allí.
"¿Eh? ¿Pasa algo? Me has sorprendido un poco..."
Hablaba con un tono amable y su amaneramiento era elegante, tal y como yo lo recordaba.
Su familia, la familia Shijouin, había sido una familia prominente durante mucho tiempo, y su padre era el presidente de una gran librería que opera en todo el país. Se podría decir que era una princesa nacida en tiempos modernos.
"A-Ahh... no... nada de eso, sólo tengo un poco de sueño. De todos modos, buenos días, Shijoin-san".
"¡Sí, buenos días!"
Shijoin-san me sonrió. Era tan linda.
A pesar de su aspecto y sus antecedentes, nunca actuaba de forma prepotente ni siquiera delante de mí, el miembro de la casta más baja de la escuela.
Sus pechos eran grandes, su cintura era estrecha y sus proporciones eran perfectas. No es de extrañar que los chicos estuvieran fascinados por ella.
A pesar de ser una chica tan agradable...
Mientras miraba su cara, sentí un dolor agudo en mi corazón. Los recuerdos de su destino en mi vida anterior volvieron a mí.
Después de graduarse del bachillerato, Shijouin-san fue a la universidad y consiguió un trabajo en cierta empresa. Al parecer, su belleza y su alegría la hicieron muy popular en su trabajo y pudo tener una carrera profesional exitosa...
Sin embargo, sus compañeras de trabajo empezaron a molestarla por ello. Se dice que se pusieron celosas de ella porque acaparaba la atención de todos los empleados masculinos.
Cosas como esconder sus objetos personales, culparla de los fallos que cometían, difundir malos rumores sobre ella y obligarla a hacer una gran cantidad de trabajo fueron sólo el principio. Todos los días se acercaban a ella y en grupo la maltrataban físicamente.
Tal vez porque era una persona seria, Shijoin-san siguió trabajando desesperadamente sin consultar a su familia. Pero como resultado de ello, cayó en la depresión...
Además, al mismo tiempo, el negocio de su familia estaba en picada, y finalmente, la familia Shijoin, cayó en la bancarrota. Esta fue otra razón por la que su familia no se dio cuenta de su estado.
Al final, Shijouin-san se quitó la vida...
Como era la hija de una gran empresa, las noticias informaron con detalle, y me enteré de la cruel verdad en medio de mi vida como esclavo de la empresa. En ese momento, me quedé tan sorprendido que perdí el apetito durante un tiempo...
En mi vida anterior, no estaba particularmente cerca de Shijouin-san.
Pero dentro del mundo gris de mi juventud, las pequeñas conversaciones que tenía con ella eran mi única salvación.
Me alegraba de que fuera capaz de abrirme su inocente corazón, aunque fuera sólo por un momento. El hecho de que una chica así existiera en este mundo me salvaba.
Pero, incluso una hermosa chica como ella no podía soportar la crueldad del mundo...
Su destino era similar al mío. Aunque experimentamos cosas diferentes, al final, ambos fuimos atormentados por la parte irracional de la sociedad.
Incluso en el momento de mi muerte, mi dolor hacia su pérdida no desapareció...
...¿Puedo... cambiar su destino?
Si pudiera cambiar el futuro, definitivamente trataría de salvarla.
Sólo que no sabía cómo.
Pero por ahora, sólo quería intercambiar unas palabras con ella por primera vez en doce años.
"Shijouin-san, pareces estar feliz, ¿Qué pasa?"
"Jeje... Anoche me quedé leyendo hasta tarde. La verdad es que me costó un poco despertarme... Pero, en fin, ¡Estuve despierta leyendo esto! Mira, es el séptimo volumen de Errand Boy of Zero!" (Referencia a Zero no Tsukaima).
Shijouin-san se rió mientras sacaba una novela ligera de su bolsa. Estaba llena de libros, algunos de ellos debían ser los libros que había tomado prestados de la biblioteca. Ah, sí, era una ávida lectora. Desde que me preguntó por las novelas ligeras, había estado leyendo diferentes géneros de novelas ligeras.
"¡Oh! ¡Ese volumen es realmente bueno! Especialmente la parte en la que el protagonista se enfrenta solo a un ejército de setenta mil personas para proteger a su ama".
"Lo sé, ¿Verdad? Me emocioné mucho con esa escena".
Nuestra trivial conversación continuó. Me sorprendió encontrarme capaz de conversar con ella de esta manera.
Nunca pude lograrlo en mi vida anterior.
"Huh... Niihama-kun, ¿No estás actuando diferente hoy?"
"¿Eh? ¿De verdad?"
"Sí. Normalmente mantienes la mirada abajo y sólo hablas cuando tienes que hacerlo... ¡Pero hoy pareces más alegre que de costumbre! Estoy sorprendida".
Tenía toda la razón.
Shijouin-san y yo estábamos en el mismo comité de la biblioteca, y tuvimos nuestra primera conversación cuando la ayudé a buscar una novela ligera.
Después de eso, la alegre Shijouin-san siguió intentando hablar conmigo. A veces decía algo así como: "¡Este libro es muy interesante!” Pero como soy virgen, sólo podía responder con un débil: “A-ah... S-sí... Seguro que lo es...” Además, ella era prácticamente un idol en la escuela, nuestra conversación no se extendía mucho más que eso.
Bueno, no es que me haya vuelto alegre ni nada por el estilo a medida que crecía... La sociedad nos insta a los adultos como yo a ser capaces de decir lo que pensamos correctamente, así que ahora mismo, sólo se me da bien hablar.
En cualquier caso, en el trabajo, ya sea una mujer hermosa, un cliente peligroso o un jefe abusivo, tienes que hacer valer tu opinión aunque no quieras.
Si no podías hacerlo, los chismes y los comentarios malintencionados eran lo menos que recibirías de la gente que te rodeaba, así que naturalmente tenías que aprender algunas habilidades de conversación.
"Ah, fue por ti, Shijouin-san".
"¿Fue por... mí?"
"Sí, pensé que era muy fácil hablar contigo porque siempre pareces muy alegre. Así que decidí seguir tu ejemplo e intentar decir más lo que pienso a partir de ahora".
Bueno, en realidad, mi jefe en mi vida anterior se molestaba si tartamudeaba una sola palabra, así que tuve que aprender a hablar correctamente para sobrevivir.
"¿Lo dices en serio...? Umm... Que me halaguen directamente así... Jeje... Gracias..."
Se rascó las mejillas avergonzada por mis palabras.
Aunque era amable y alegre, era bastante infantil.
Por eso, aunque había un montón de chicos intentando ganar su atención, ella era ajena a todo eso y nunca se clavaba en una cita a pesar de su buena apariencia.
"Ah, claro, esos libros, los devuelves a la biblioteca, ¿No? Parecen pesados, déjame llevarlos todos por ti".
"¡Eh, está bien! Puedo con todo esto..."
"Insisto en ayudarte, el bachillerato está a la vuelta de la esquina de todos modos.."
Dije mientras tomaba rápidamente la bolsa llena de libros que llevaba.
...Espera un segundo... ¿Qué estoy haciendo? ¿He hecho todo eso inconscientemente?
Oh no, esa es mi costumbre en el trabajo...
Había varias ancianas molestas en el trabajo. Cada vez que me cruzaba con ellas, me decían: "Eres un hombre, sé más considerado". Cada vez que veas a una mujer mayor sosteniendo su equipaje así, ofrécete inmediatamente a ayudarla'.
Esto me ocurrió tantas veces que al final adquirí la costumbre de llamar y ofrecer mi ayuda a las mujeres mayores que llevaban un equipaje de aspecto pesado.
"Oh, muchas gracias. Para ser sincera, creo que he tomado prestados demasiados libros... Mis brazos son débiles... así que esto es realmente una gran ayuda para mí".
Genial... me alegro de que no haya pensado que estoy siendo intenso o algo así.
A veces mi memoria embellece las cosas con nostalgia y parecen ser mejores de lo que realmente eran. Pero en el caso de Shijouin-san, todo en ella era exactamente como la recordaba.
Y esta era la primera vez que podía hablar correctamente con ella. Este hecho me hizo muy feliz.
"No sólo la forma de hablar... ¡Incluso tus gestos son tan diferentes ahora, Niihama-kun!"
"¿De verdad?"
"¡Sí! ¡Eres más infantil y menos reservado! Eres tan genial!"
"...¡Guh!..."
Esta chica, Shijouin Haruka era una chica que podía decir casualmente cosas como esa con una gran sonrisa en su cara.
¡Su sonrisa es demasiado hermosa! Mi corazón...
Jaja... bueno... con tal de poder escuchar sus cumplidos así... supongo que vivir esos infernales doce años valió la pena.
"G-gracias. Me alegra escuchar eso de ti. De todos modos, Shijouin-san, tomaste prestados muchos libros, ¿No es así? ¿Hubo algo más que te llamara la atención?"
"¡Ah, sí! En realidad, ¡todos eran interesantes! Está este que..."
Shijouin-san y yo caminamos juntos hacia la escuela, hablando de cosas triviales.
No había muchos estudiantes de nuestra escuela cerca, pero a los que estaban cerca no les gustaba el hecho de que un nerd sombrío como yo y la hermosa y famosa Shijouin-san estuvieran caminando juntos.
Pero a mí no me importaba. Después de todo, decidí vivir una vida diferente esta vez.
Y fue gracias a esta determinación que pude caminar junto con Shijouin-san, cosa que no pude hacer en mi vida anterior cuando estaba constantemente en los ojos de los demás.
Estaba decidido a vengarme de nuevo de mi juventud. Sentí una calidez en mi corazón mientras hablaba con la chica que se suponía que no volvería a ver.
*
Mi antiguo salón de clases... Qué nostalgia...
Me sentí profundamente conmovido cuando atravesé la puerta del bachillerato y me puse los zapatos de interior, pero esa sensación no podía compararse con el momento en que entré al salón.
Los pupitres, las sillas, las pizarras y ese ambiente bullicioso... Este era mi antiguo salón de clases.
"Entonces, Niihama-kun. Nos vemos después de clases".
"¿Eh?... Ah, claro, nos vemos."
Dijo Shijouin-san mientras nos separábamos en la entrada del salón. Aunque respondí a sus palabras, no pude recordar inmediatamente de qué estaba hablando.
¿Después de clases? ...¿Por qué después de clases?
Ah, sí. ¡El comité de la biblioteca!
La única razón por la que Shijouin-san y yo tenemos alguna conexión es porque estábamos juntos en el comité de la biblioteca... Cierto, ahora lo recuerdo.
Y aparentemente, nuestro turno era hoy..
Bueno, eso puede esperar hasta más tarde, por ahora, vamos a tratar de terminar el primer día de clases primero.
Ahora, ¿Dónde está mi asiento de nuevo? ...Ah, ahí está... Woah, este escritorio y silla de madera... Siento nostalgia con sólo verlos.
La verdad es que no recordaba dónde estaba exactamente mi asiento, pero la mochila de mi uniforme de gimnasia estaba colgada junto al asiento, así que pude identificarla.
Al buscar en mi pupitre, encontré libros de texto y cuadernos que había dejado dentro. Al verlo, me sentí alegre y nostálgico a la vez, como si hubiera desenterrado una cápsula del tiempo.
¡Woah! ...¡Mis apuntes de entonces! Qué mala era mi escritura en ese entonces, ¿Eh?
Después de hundirme en la nostalgia, sonó el timbre y por fin empezó la clase. Habían pasado doce años desde la última vez que asistí a una, pero pude responder a las instrucciones del representante de la clase para los saludos matutinos. Me sentí bien.
Después de la charla del profesor, una de las chicas se acercó al frente.
Su pelo no era ni largo ni corto. Llevaba gafas y su cara era bastante bonita. Sin embargo, no tenía expresión, nunca pude entender lo que estaba pensando.
Sinceramente, no me dejó ninguna impresión.
Uhh... su nombre era... ¿Kaza... algo?
"Soy Kazamihara. Me han nombrado una miembro del comité para el festival cultural. Por ahora lo que tenemos en la agenda es decidir qué evento debemos celebrar para el festival. Si tienen alguna idea, no duden en ponerse en contacto conmigo lo antes posible, ya que sólo tenemos una semana de plazo para ello. Además, si hay alguna idea tonta como 'café bikini' o 'hoguera interior'..."
La chica de las gafas, Kazamihara, nos informó de forma mecánica sin ningún atisbo de cambio en su expresión antes de volver rápidamente a su asiento. La forma en que lo hizo me recordó a un NPC aburrido.
Aun así, el festival cultural... Es esa época del año, ¿Eh?
Ahora lo recuerdo. El bachillerato celebraba su festival cultural en primavera. Para ser honesto, el evento no me dejó mucha impresión, no se pudo evitar que se me olvidara por completo.
Bueno, lo dejaré para más adelante. Lo más importante ahora mismo es acostumbrarme a la vida del bachillerato. Tengo que volver a aprender todo desde cero otra vez, ¿eh?
Sólo era el primer día, así que tenía que acostumbrarme a muchas cosas. Además tenía que tener todo el tema del festival en la cabeza.
Por cierto, la clase de hoy era de matemáticas... ¿Cómo has vuelto a hacer cálculo diferencial e integral?, Es más, ¿Qué rayos es el cálculo?
*
"Hey, Niihama..."
"¿Eh? Tú eres... Ginji, ¿Eh?..."
Actualmente era la hora del descanso entre clases.
El chico que me llamó era el único amigo que tenía en el bachillerato.
Su nombre era Yamahira Ginji. Era un nerd como yo, pero tenía el pelo corto y su aspecto era bien cuidado. Parecía más un deportista que un nerd. Sobre este asunto, solía decir: "Si me visto como un nerd, me molestarán enseguida. Esta es mi manera de defenderme'.
Este es el único tipo con el que me he tomado unas copas después de la graduación.
"¿Ah? ¿Por qué esa cara de confusión? ...Bueno, eso no es importante... Entonces, ¿Qué demonios fue eso?"
"¿Qué demonios fue qué?"
"¡No te hagas el tonto! ¡Estoy hablando de Shijouin-san! ¡¿Qué estabas haciendo, coqueteando con ella temprano en la mañana?!"
"¿Qué? No, me la encontré de camino a la escuela. Llevaba un montón de libros, así que le eché una mano".
"¿Eh? ¡¿HUH?! ¡¿TÚ QUÉ?! ¿Tú que ni siquiera podías formar una frase correctamente cuando intentabas hablar con las chicas? ¡¿Por qué te comportas ahora como un ikemen de manga shoujo?!"
Para ser justos, lo hice inconscientemente, ¿Vale? Bueno, supongo que si él estaba familiarizado con mi yo sombrío, mi acción estaba tan fuera de personaje, ¿Eh?
"De todos modos, tú... Espera, no pareces diferente... Pero esa forma de hablar... y el aura sombría que te rodea ha desaparecido... ¿Estabas tal vez, reencarnado en otro mundo y volviste ayer después de vencer a un señor demonio en algún lugar?"
Casi, pero en realidad fue un salto en el tiempo, amigo mío.
"¡Haz dado en el clavo, Ginji! Hasta ayer estaba en un mundo diferente. Tuve que soportar doce años de trabajo no remunerado. Tuve que trabajar desde primera hora de la mañana hasta última hora de la noche mientras era constantemente molestado e insultado por mis compañeros de trabajo!"
"¡Ja, ese sí que es un mundo oscuro al que te has transportado!"
Desafortunadamente, eso sucedió en el mundo real
Para quien no estaba contaminado por el lado oscuro de la sociedad, podría sonar como una broma divertida. Pero tristemente, era la realidad. El demonio existía en esta época.
Sí, pero hacía tiempo que no tenía esta conversación con él.
La sensación de haber vuelto a esa época se hizo más fuerte.
"Bueno, Shijouin-san es amable y gentil, así que está abierta a gente como nosotros, pero no deberías adelantarte. El líder de los deportistas y los riajuu (Básicamente lo conrtrario a un otaku, es decir, una persona que disfruta más del mundo real y sus interacciones, que el manga, anime o videojuegos) va detrás de ella, y tú simplemente no tienes ninguna posibilidad".
Vaya, no sabía que la palabra "riajuu" ya existía en esta época.
"Lamentablemente, los nerds como nosotros somos la casta más baja del bachillerato. Si destacas un poco y los de la casta superior se fijan en ti, podrías ser un objetivo de acoso escolar."
Ah, claro... La castas... Me acuerdo de eso...
Pensando en el pasado, era una regla no escrita que un grupo de niños se peleara por los puestos.
En realidad, espera, incluso cuando crecemos todavía hacemos un escándalo por cosas triviales como esa...
"Bueno, tendré cuidado. Gracias por el consejo, Ginji".
Aún así, no importaba quién intentara mantenerme a raya, no dejaría que esta segunda vida mía volviera a ser un fracaso.
El resultado de no hacer nada por el miedo constante a ser atacado por otros era una vida aburrida de joven y un futuro como esclavo corporativo de una empresa explotadora donde era obligado a trabajar duramente como un animal..
Voy a hacer lo que quiero.
Esta vez, no me arrepentiré de nada.
*
Y durante el mismo día en que tomé esa decisión, él apareció.
"Hey, asqueroso nerd, Niihama. Date la vuelta".
Era la hora del almuerzo. Mientras sacaba mi billetera frente a la máquina expendedora, me llamó.
Este tipo... Hino...
Inmediatamente pude recordar el nombre del chico maleducado que tenía delante. Su uniforme parecía desgastado y llevaba piercings en las orejas.
Era alguien que se dirigía a los estudiantes débiles de mente y les decía: 'Oye, dame algo de dinero. Somos amigos, ¿No?' Y si mostraban algún signo de rechazo, los amenazaba diciendo: 'Oh, quieres pasar por encima de mi, ¿No?'.
Recuerdo la espeluznante sensación de encontrarme con este tipo en el campus, y el miedo a que me agarrara por el pecho y me gritara.
En aquel momento, este tipo era un objeto de miedo para mí, y estaba tan asustado que tenía que escabullirme y esconderme para no encontrarme con él...
Huh... Él no da miedo en absoluto...
No me sentí intimidado por él en absoluto. Era hasta el punto de querer decir: "¿De qué tenía miedo entonces?". Al contrario, su mirada rebelde lo hacía parecer infantil y tuve que resistir el impulso de reírme de él.
"Bonito lugar el que tienes aquí. Oye, dame algo de dinero Niihama, amigo mío. Me olvidé de traer algo de dinero para mi almuerzo".
Me miraba con una sonrisa de satisfacción, como si yo fuera un tonto. De hecho, en ese momento, probablemente fui un tonto para él. Pero... ahora soy diferente.
"¿Ah? ¿Eres tonto? ¿Por qué iba a darte mi dinero?"
"¿Qué?"
Tal vez no esperaba que lo rechazara, pero parecía sorprendido.
"¡¿Me estás jodiendo?! ¿Crees que eres lo suficientemente bueno como para responderme así? ¡No hagas el valiente, pedazo de mierda! Te voy a dar una paliza".
"Cierra la boca. No tengo tiempo para tus juegos de delincuente".
"¿Juegos de delincuentes? ...Cabrón, realmente quieres que te dé una paliza, ¿no?"
"Es decir, todo es una actuación, ¿No? No eres un delincuente de verdad, sólo actúas como tal. No tienes los huevos suficientes para pegar a alguien en verdad, ¡ja!"
Sí, no lo sabía en ese momento, pero nunca escuché nada de que realmente golpeara a alguien. Tampoco intentó contradecir a los profesores ni nada parecido. Está claro que no era un auténtico delincuente, era todo palabrería.
"Además, sé que ibas por ahí tomando pequeñas cantidades de dinero de varios alumnos para que todo no se convirtiera en un gran problema. Si tomaras una gran cantidad de dinero, te meterías en problemas después de todo. Actuando como un delincuente cuando no tienes el valor para convertirte en uno, patético".
"¡hey, hey! ...¡Cabrón! ¡Niihama! ¡¿Te estás burlando de mí, no?! ¡Te voy a enseñar!..."
Como esperaba, la cara de Hino se puso roja y estalló. Me amenazó con su característica voz alta, pero yo ya no era lo suficientemente ingenuo como para que esas amenazas funcionaran.
En mi vida anterior como esclavo corporativo, mis jefes me habían amenazado de varias maneras.
Tienes que hacer este trabajo. Si no, te bajaré la valoración del trabajo'. 'Quédate conmigo. A partir de mañana, tu trabajo consistirá en organizar los suministros en un almacén subterráneo que no se ha organizado desde hace años.' '¡No existe tal cosa como el abuso de poder aquí! Si vuelves a decir algo así, lo haré de verdad'.
A menudo llegaba hasta las lágrimas al ver el inmenso poder de aquellos que controlaban el pequeño mundo de la empresa.
Comparado con eso, él es sólo un niño sin poder. No importa lo fuerte que grite, no me asusta.
"Entonces, ¿Qué vas a hacer? ¿Quieres pegarme? Entonces, hazlo. Vamos, hazlo. ¿Qué? ¿No puedes hacerlo ahora porque estamos en medio de una multitud? Mírate, todo un perro que ladra, pero no muerde. Al final tienes miedo de que te suspendan, qué broma".
"¡Maldito nerd! ...¡No me jodas!"
Hino extendió su mano hacia mí.
Hubiera sido conveniente para mí que me diera un puñetazo, pero su objetivo era la cartera que tenía en la mano.
Tomó mi cartera, que contenía los tres mil yenes que me había dado mi madre.
"¡Ja! ¡Hoy te quitaré la cartera como castigo por ser tan engreído! Bueno, dentro hay... ¿Qué diablos? ¿Sólo son tres mil?"
Sólo 3.000 yenes.
Jajaja, sólo 3.000 yenes, dijo.
Este mocoso... ¡Cómo se atreve...!
"No creas que se ha acabado, la próxima vez me aseguraré..."
Estaba a punto de irse, pero se detuvo a mitad de la frase.
Fue porque lo agarré por el pecho con ambos brazos.
"Maldito... ¿Qué crees que...?"
"Cierra la boca".
Cuando lo miré con rabia, me devolvió la mirada. Los ojos del falso delincuente se abrieron de par en par, como si no hubiera esperado una respuesta agresiva por mi parte.
"Vas a tomar el dinero, ¿verdad?".
La voz que salió de mi boca sonó con más frialdad de la que nunca había escuchado.
"Dijiste que sólo eran tres mil yenes e intentaste quitármelos".
"¿Sí? Entonces, ¿qué...?"
"¡No me jodas!"
Cuando grité con fuerza, Hino y los estudiantes que lo rodeaban se quedaron paralizados.
"¡¿Qué son tres mil yenes, cabrón?! ...¿Tienes idea de lo que cuesta ganar esa cantidad?"
Estaba completamente enfurecido.
Sin duda, Hino nunca había ganado dinero por su cuenta.
No entendía en absoluto el peso y el valor del dinero.
Estaba increíblemente enfurecido porque un mocoso como él había intentado quedarse con el dinero que mi madre había ganado con su trabajo.
"¡Trabajo tanto con el teclado que los brazos me están matando! ¡A veces tienes que inclinarte y rascarte mientras los clientes locos te gritan! Si cometiera un solo error, me llamarían idiota, tonto o incluso me dirían que me suicidara!"
¿Debería ser una ofensa excusable que un chico que no sabía lo que hacía se comportara como un delincuente y se llevara por descuido el dinero de los demás? No, estaba más allá de lo que se puede permitir por ignorancia.
"¡No me importa lo mucho que pretendas ser un delincuente, sólo eres una mierda que todavía depende de sus padres para todo! ¡La próxima vez que trates de conseguir algo del dinero duramente ganado por mis padres! Te voy a matar... ¿Entendido?"
"Ah... Oh..."
"He dicho... ¡¿Entiendes?!"
"A-ahh...si"
Tal vez mi furia con el idiota por tomar mi dinero tan a la ligera había surtido efecto, Hino contestó mientras me miraba confundido.
Quité la mano del pecho del falso delincuente, recuperé mi cartera y me fui. Era perfectamente consciente de que estaba atrayendo mucha atención.